Este miércoles 20 de enero el presidente actual de los Estados Unidos, Donald Trump, dejará su cargo y la Casa Blanca, pero antes de irse ha puesto en aprietos a decenas de empresas chinas.
El viernes pasado nos enterábamos gracias a Reuters que gracias a una enmienda publicada en noviembre del año pasado junto a una nueva orden dañaba fuertemente a Xiaomi y otras empresas de origen chino, quienes iban a ver como en las próximas semanas diversas empresas estadounidenses empezaban a quitar su capital de ellas y es que al final todo apunta que sucederá lo mismo que Huawei.
A mediados de mayo del 2019, Trump puso en la Lista de Entidades a Huawei con la excusa de espionaje. Hasta la fecha no se ha comprobado.
Pues bien, el día de ayer gracias nuevamente a Reuters nos enteramos que antes de dejar su cargo, Trump le ha clavado un puñal más a Huawei.
Recordemos que si bien Huawei no cuenta con los servicios de Google debido al baneo del Departamento de Comercio de Estados Unidos, tampoco puede adquirir tecnología estadounidense si es que esta no está aprobada por dicho Departamento y el día de ayer Trump volvió a quitar el permiso de las empresas estadounidenses que habían retomado su trabajo con el fabricante chino.
Reuters afirma que en los últimos días el gobierno de Donald Trump ha empezado a revocar las licencias de algunas empresas estadounidenses que le vendían tecnología a Huawei, como el caso de Intel, fabricante de chips para laptops y PCs.
El medio revisó un correo enviado por la Asociación de la Industria de Semiconductores (SIA) que revela las últimas acciones hechas por el Departamento de Comercio, mencionando que Intel podría ser una de las afectadas por la revocación de dicha licencia.
En ese mismo correa se menciona que el Departamento de Comercio tiene intenciones de negar un número significativa de solicitudes de licencia de exportaciones a Huawei, incluyendo ya a las solicitudes anteriormente aprobadas luego de haber sido revocadas al inicio del baneo.
Se sabe que hasta el día de hoy hay más de 150 solicitudes de licencia pendientes para trabajar con Huawei. En estas licencias hay cerca de 120.000 millones de dólares en tecnología y bienes que las empresas estadounidenses se estarían perdiendo por el gobierno de Donald Trump, que para suerte de ellos está a unas 72 horas de dejar de su cargo.
La acusación puede ser verdad en cierta forma. Hasta donde se sabe todo fabricante de dispositivos móviles puede instalar puertas traseras, pero estas se encuentran restringidas y son exclusivas de las fuerzas del orden público. Según algunos miembros del gobierno estadounidense, Huawei se habría saltado esta excepción.
Como era de esperarse al gigante asiático no le ha agradado nada estas declaraciones, que aparte fueron «reforzadas» con pruebas, aunque según el WSJ los reportes asociados a espionaje eran bastante pobres.
Pues bien, Huawei se comunicó con nosotros el viernes por la tarde e hizo una declaración que estamos compartiendo con ustedes luego de esta oración.
Como quedó en evidencia en las filtraciones de Snowden, Estados Unidos ha estado accediendo de manera encubierta a redes de telecomunicaciones en todo el mundo, espiando a otros países por mucho tiempo. El reporte del Washington Post esta semana acerca de cómo la CIA utilizó a una compañía de encriptación para espiar a otros países por décadas, es solo otra prueba.
Las declaraciones de Estados Unidos acerca de que Huawei usa intercepciones legales no son más que una cortina de humo – no se adhieren a ninguna forma de lógica aceptada en el dominio de la ciberseguridad. Huawei nunca ha accedido ni accederá de manera encubierta a las redes de telecomunicaciones, ni tenemos la capacidad de hacerlo. The Wall Street Journal es claramente consciente de que el gobierno de Estados Unidos no puede ofrecer ninguna evidencia para fundamentar estas declaraciones, y aun así optó por repetir las mentiras difundidas por estos funcionarios estadounidenses. Esto refleja el sesgo de The Wall Street Journal contra Huawei y disminuye su credibilidad.
El papel de Huawei como vendedor de telecomunicaciones es proveer de equipo que siga los estándares 3GPP/ETSI, de la misma forma que cualquier otro vendedor. Estamos obligados a seguir estándares de intercepción legales en toda la industria como el TS 33.107 de la 3GPP para redes 3G, y el TS 33.128 para 5G de la 3GPP. Hasta ahí terminan las obligaciones con respecto a las intercepciones legales.
La administración real y el uso de interfaces de intercepción legales se conducen solamente por los operadores y los reguladores. Las interfaces de intercepción siempre están localizadas en edificios protegidos del lado del operador, y son operadas por empleados que son evaluados por el gobierno de los países donde operamos. Los operadores tienen reglas muy estrictas para operar y mantener estas interfaces. Más allá de esto, Huawei no desarrolla ni produce ningún equipo de intercepción.
Huawei es solamente un proveedor de equipo. En este rol, acceder a las redes de nuestros clientes sin su autorización y sin su visibilidad sería imposible. No tenemos la capacidad de sobrepasar a los operadores, acceder al control y tomar datos de sus redes sin ser detectados por los sistemas de seguridad y firewalls normales. De hecho, incluso The Wall Street Journal admite que los funcionarios de Estados Unidos no son capaces de proveer ningún detalle concreto en relación a estas llamadas “backdoors”.
La ciberseguridad y la protección de la privacidad del usuario son de máxima prioridad para Huawei. Los señalamientos hechos por funcionarios de Estados Unidos ignoran por completo la enorme inversión y las mejores prácticas de Huawei y de los operadores en relación a la administración de riesgos de ciberseguridad. Estamos muy indignados porque el gobierno de Estados Unidos no ha escatimado en esfuerzos para estigmatizar a Huawei al utilizar asuntos de ciberseguridad. Si Estados Unidos descubre violaciones por parte de Huawei, nuevamente solicitamos solemnemente que Estados Unidos revele evidencia específica en lugar de utilizar a los medios para difundir mentiras.
Han pasado cinco meses desde que el Departamento de Comercio de los Estados Unidos amenazaba el apogeo de Huawei luego que la guerra comercial entre China y dicho país se intensificara.
La empresa líder de tecnología de origen chino fue colocada en la lista negra de empresas con las que el gobierno de EEUU no trabaja, por lo que se le impedía la posibilidad de comprar tecnología de origen estadounidense, ya sea en hardware o software.
Si bien Huawei, a través de su propio CEO y ejecutivos, restaron importaron a la prohibición, no pasó más de dos semanas para darse cuenta que efectivamente este baneo iba a ser totalmente perjudicial para su crecimiento.
Alphabet le cerraba las puertas de Android By Google, por lo que sus próximos dispositivos no iban a recibir la suite de Google de fábrica, como por ejemplo los Mate 30 y posteriormente los siguientes dispositivos a estrenarse. Claro, salvo el veto de comercialización se levante.
Por supuesto ellos no fueron los únicos. Intel, Qualcomm, Nvidia, Microsoft, AMD, Facebook y otras empresas también cortaban sus negocios con Huawei, por lo que el gigante chino no podía adquirir componentes para sus dispositivos. La situación empeoró por completo cuando la empresa británica ARM le negó la licencia, siendo el Kirin 990 el último procesador que podían usar.
Para dejar de depender de tecnología estadounidense y de terceros, la empresa ha destinado más de mil millones de dólares en innovación y desarrollo en aplicaciones que reemplacen a las de Google, mientras que en hardware están haciendo todo lo posible para encontrar reemplazos a los chipsets populares. Lo mismo ocurrirá con Android by Google, el cual ya tiene reemplazo: Harmony OS.
La paz está tardando
Huawei en el medio del fuego cruzado entre EE.UU. y China
Para suerte de Huawei, justo a puertas del G7, EEUU y China firmaban la paz. Si bien muchos pensaban que la administración de Trump era la que perdía luego de ceder al gobierno chino, la verdad es que ellos salieron ganando.
Daban 90 días de prórroga para que los consumidores de Huawei, ya sean naturales como empresas, busquen alternativas de reemplazo y en el caso del gigante chino se le daba este tiempo para adquirir componentes. Obviamente el gobierno estadounidense iba a ser el encargado de aceptar las órdenes de compra y, tal como se confirmó semanas después, no aceptaron ninguna.
EEUU asegura que Huawei es la puerta trasera del gobierno chino, esto quiere decir que los acusan de espiar a sus usuarios pero hasta el momento no han mostrado ninguna prueba.
A mediados de agosto, Estados Unidos le daba sus últimos 90 días de extensión a Huawei para comercializar con empresas estadounidenses y si bien todo apuntaba a que sería el fin del pleito entre China y Estados Unidos nos equivocamos. Junto con la prórroga, el Departamento de Comercio de Estados Unidos añadía a la lista de prohibición a 46 socios del gigante chino, perjudicándolo aún más.
Pues bien, a pesar del esfuerzo del gobierno estadounidense de arruinar a Huawei, la empresa china no solo ha resistido los dos golpes directos de la administración de Trump, sino que además ha crecido su cuota de mercado y ha logrado unir a los consumidores chinos, quienes están apoyando a su marca nacional con la compra de sus dispositivos, lo que también perjudica a otras marcas locales como Xiaomi, Oppo y Vivo.
¿Será que el enfrentamiento llega a su fin? Es posible, aunque ahora mismo Estados Unidos tiene toda las de ganar, por lo que si quiere frenar al gigante chino lo ideal sería mantener el plan actual. Igual está claro que Donald Trump es un personaje totalmente impredecible.
¿Por qué Estados Unidos bloquea a Huawei?
El speech del gobierno de Donald Trump es simple: Huawei es la puerta trasera del gobierno chino y por lo tanto espía a sus usuarios. Eso sí, hasta la fecha no han demostrado lo sucedido.
Otra razón del bloqueo y por la cual se encuentra en un proceso abierto Mengh Wanzhou, Directora financiera de Huawei e hija menor del presidente de la empresa, es que el fabricante chino habría vendido a través de filiales sus dispositivos a Irán, país prohibido de recibir tecnología estadounidense, por lo que no solo recibieron una multa, sino también la amenaza de incluirlos en la lista negra.
La realidad es otra y es que Estados Unidos está aprovechando que son el país con la mayor cantidad de patentes de tecnología, incluyendo las empresas más populares en todo el planeta, para frenar la expansión de China, quien cada vez amenaza más la hegemonía de EEUU. De esta forma la administración de Trump busca hacer presión al crecimiento de oriente.
El bloqueo también trae información errada. Muchos usuarios piensan que EEUU bloquea a Huawei por temor a que Apple pierda territorio pero la verdad es que la cifra de usuarios que pasan de un iPhone a un teléfono chino son bastante bajas, sin contar que la empresa de Cupertino genera dinero por su cuenta y compite, en su gran mayoría, consigo misma.
Si un usuario de Apple se pasa a Android, suele ir directamente a Samsung. Esto es reforzado en EEUU, donde Huawei tiene una presencia nula y en Canadá, donde la cuota de mercado de los chinos es bastante baja.
Por supuesto hay un factor muy importante, el cual marca el futuro de la tecnología como lo conocemos y en el que China lleva una amplia ventaja a Estados Unidos: el 5G.
No es ningún secreto que la tecnología 5G es el futuro, no solo porque nos permitirá descargar y subir contenido más rápido, sino porque será el responsable de las ciudades inteligentes, el internet de las cosas (IoT) y más.
EEUU sabe bien que no puede frenar el crecimiento de Huawei en este rubro, razón por la que se han visto obligados a frenarlo a través de la prohibición. De hecho han hecho pensar al gigante chino para que licencie su tecnología a empresas estadounidenses.
Así que a falta de pruebas presentadas por Estados Unidos podemos decir que la prohibición a Huawei es netamente por un tema comercial contra China.
Los Mate 30: teléfonos excepcionales sin soporte de Google
El mes pasado Huawei anunció los Mate 30 y Mate 30 Pro, dos dispositivos que destacan por su rendimiento, autonomía y un sistema de cámaras nunca antes visto, mejorando el tamaño de sensores y funciones de los dispositivos tradicionales.
Sobre el papel, los actuales buques insignias de Huawei no solo competían directamente con los Galaxy Note 10 y los iPhone 11, sino que en algunos apartados los superaban, como la autonomía y fotografía, pero su éxito se ha visto pausado por la falta de aplicaciones de Google.
¿Qué quiere decir esto? Que si adquieres actualmente un Mate 30 o Mate 30 Pro no tendrás las apps de Google instaladas de fábrica, el Android que llevan también es un fork del sistema operativo original y se llama EMUI 10, por suerte está basado en Android 10.
Por supuesto las aplicaciones de Google pueden instalarse de forma ilegal, después de todo no pueden hacerlo oficialmente y Huawei lo sabe, pero el proceso no es sencillo y el grueso de usuarios no lo haría. Sin contar que es totalmente peligroso pues estarías dando tus accesos e información a terceros.
Un posible KO definitivo
Por un momento olvidemos todo lo que he mencionado hasta el momento. Existe una forma en la que EEUU deje fuera de juego a Huawei, aunque seria una forma muy vil de hacerla. Un KO definitivo.
¿Cuál sería? La prohibición total de tecnología de origen estadounidense. No solo perderían acceso a Android by Google (lo cual ya es un hecho desde el anuncio de los Mate 3o), sino también los dejaría sin la posibilidad de usar Windows, procesadores de Intel, gráficas de Nvidia o AMD, software profesional como la suite de Adobe, las apps de mensajería más populares como WhatsApp o incluso el acceso oficial a las redes sociales de moda (Facebook, Instagram, Twitter, Snapchat y YouTube).
A pesar del veto, Huawei sigue creciendo y se posiciona como 2do fabricante de dispositivos móviles
El gobierno de Estados Unidos tiene toda su artillería actualmente encima de Huawei y esto no parece importarle al fabricante chino.
Durante 2018, Huawei logró vender 200 millones de unidades y para este 2019 espera vender 250 millones de smartphones.
La firma asiática ha logrado alcanzar ingresos de 610.800 millones de yuanes o el equivalente a 86.100 millones de dólares en los primeros nuevos meses de este 2019, consiguiendo un crecimiento de 24%. Dinero recibido gracias a la venta de dispositivos móviles e infraestructura 5G.
En este tercer trimestre, Huawei ha logrado distribuir un total de 67 millones de smartphones, incrementando sus ventas en un 13.5% frente al mismo período durante el 2018.
Y todo esto con la prohibición de EEUU encima. De hecho queda bastante claro que el fabricante no necesita el mercado estadounidense para gobernar el mercado de dispositivos móviles e incluso con la prohibición encima puede lograr cosas sorprendentes en su país natal, aunque obviamente esto no debería ser la meta de Huawei, después de todo su visión siempre ha sido salir de China y dominar el resto de mercados.
Actualización: Ya es oficial. EEUU extendió la licencia de compras de Huawei por 90 días.
Ha pasado más de un mes desde que el Departamento de Comercio de los Estados Unidos levantó la prohibición a Huawei luego de haberla incluido en la lista negra de empresas con las que no trabaja. ¿Qué significa esta lista? Pues que un fabricante no puede acceder, ya sea como compra o alquiler de servicios, a tecnología estadounidense.
Durante el mes de prohibición las ventas de Huawei bajaron en occidente pero se mantuvieron muy fuerte en Asia, específicamente en China, gracias a esto se demostró no solamente que el gigante chino tenía el apoyo de su país natal, sino que también se comprobaba que no necesita otro mercado más que el chino pues solo ahí vendió todo lo que logra vender Apple a nivel mundial en el mismo trimestre.
Por suerte todo cambio y un día antes de iniciar el G20 los presidentes de EEUU y China firmaban la pipa de la paz y se levantaba la prohibición a Huawei hasta el 19 de agosto del presente, hasta el día de hoy.
Muchos piensan que el gran ganador fue China y Huawei, pero la verdad es que Donald Trump se salió con la suya. Demostró que podía frenar a la empresa tecnológica china de mayor crecimiento al día de hoy, bajó sus aranceles a la importación de componentes de materia prima china y se dio el «lujo» de darle permisos de compra a Huawei.
Pues bien, desde el viernes pasado se viene escuchando que el gobierno de Donald Trump extendería por un tiempo más la licencia de compra de tecnología estadounidense a Huawei y todo apunta a que será verdad, al menos eso a firma Reuters.
La licencia general temporal se extendería durante 90 días más, afirma el medio de Reino Unido, y la razón sería para que las empresas estadounidenses se adecuen a estos cambios, ya que algunos de los proveedores de Huawei se encuentran en zonas rurales de EEUU.
Si bien Estados Unidos no es el país que tiene la mayor cantidad de proveedores para Huawei definitivamente es el más importante. Los componentes, tecnologías y servicios desarrollados en suelo norteamericano abarcan empresas como Google, Intel, Microsoft, Nvidia, AMD, Qualcomm, Micron Techonology y otras, sin contar que la prohibición hecha por EEUU también es validada por sus aliados de Corea del Sur, Reino Unido, Alemania y Japón.
Las empresas de origen estadounidense estaban obligadas a aceptar la prohibición hecha por el gobierno de Donald Trump.
Por ejemplo, lo que sucedió en mayo de este año, fecha de la prohibición, involucraba a Qualcomm, Intel, Microsoft, Google (Android y servicios de la empresa), Micron Technology y ARM, empresas que son de suma importancia para el fabricante.
Sin poder acceder a Android y sus servicios Huawei se vio obligado a anunciar HongMeng OS y posteriormente Harmony OS, pero sin la licencia de ARM se tendría que crear una nueva arquitectura desde cero, sin contar que no podrían usar Windows, ni procesadores de Intel o AMD, ni tampoco programas como Microsoft Office, Adobe, Steam y un largo etcéra.
Así mismo el secretario de Comercio, Wilbur Ross, mencionó que recibió más de cincuenta solicitudes hasta finales de julio por parte de los proveedores de Huawei para suspender la prohibición hecha por el gobierno.
Durante el 2018 Huawei gastó 70.000 millones de dólares en compras de componentes, pero solo 11.000 millones fueron para empresas estadounidenses. Aún así los componentes hechos en EEUU son de suma importancia para la supervivencia de Huawei, al menos a corto plazo.
Ha pasado más de un mes desde que Estados Unidos incluía en la lista negra de empresas a Huawei, decisión respaldada por Donald Trump quién aseguraba que la empresa era la puerta trasera del gobierno chino, así misma también culpable de venderle productos con tecnología estadounidense a Irán.
La semana pasada se confirmaba solo una de las demandas hechas por EEUU y era la venta de productos con su tecnología a un país en la lista negra, Irán. Lo que nunca se demostró a pesar del carga montón mundial fue que Huawei no respete la privacidad de sus usuarios y que toda la información recolectada sea monitoreada por el gobierno chino.
Aún así un día previo al inicio del G20, EEUU y China ponían fin a su disputa comercial y por lo tanto Huawei podía seguir adquiriendo tecnología estadounidense, ya sea en software y hardware.
Muchos piensan que perdió EEUU, pero la realidad es que es todo lo contrario. El gobierno de Trump mantuvo los aranceles actuales y supervisa la compra de tecnología por parte de Huawei.
Pues bien, a pesar de todo lo anteriormente mencionado y otros problemas, a Huawei no le ha costado absolutamente nada batir su propio récord en comparación al anterior año fiscal.
Tanto sus ventas como ingresos han aumentado enormemente, específicamente un 23,2% más a comparación del periodo del ejercicio anterior. Los beneficios aumentaron un 8,7% a comparación del mismo periodo y las ventas de smartphones aumentaron en un 24%, logrando vender 118 millones de teléfonos en la primera mitad del 2019.
La división de smartphones representa el 55% de ingresos de la compañía en este período, mientras que el resto se divide entre la división de empresas y despliegue de telecomunicaciones, la cual aumentará más en los próximos semestres por el la implementación de las primeras redes 5G.
“Seguimos creciendo a pesar de haber sido incluidos en la entity list. Eso no significa que no tengamos dificultades por delante. Las tenemos, y probablemente afecten a nuestro ritmo de crecimiento en el corto plazo”, ha asegurado Liang Hua (presidente de Huawei) a través de un comunicado oficial.»
Liang también menciona que las inversiones en desarrollo y tecnología no pararán, mencionando que invertirán 120.000 millones de yuanes solo este año (más de 1.7 mil millones de dólares).
Ha pasado más de un mes desde que el gobierno de Estados Unidos, liderado por Donald Trump, dice incluir a Huawei a la lista negra de empresas que no pueden comercializar con EEUU, prohibiendo la compra de hardware y software y así colocándola entre la espada y la pared.
Por supuesto Huawei es una empresa enorme con todo el potencial para no depender de proveedores de hardware y software, el gran problema es crear los componentes faltantes en corto plazo. Por suerte en software están más avanzados y ya veían desde hace unos años que EEUU podría cerrarles el acceso a Android, por lo que ya tienen un sistema operativo de respaldo.
Pues bien, según información publicada por Bloomberg, Huawei espera tener una caída en ventas entre 40 a 60 millones de smartphones este 2019, una cifra que lo alejaría de su meta de ser el número 1 y lo regresaría al tercer lugar.
El reporte indica que el principal problema de Huawei es fuera de China, lugares donde la prohibición de EEUU se ha escuchado fuerte y ha disminuido sus ventas, por lo que la empresa habría decidido poner todas sus fuerzas en china para conseguir la mitad de cuota de mercado este mismo año.
De hecho la situación es más complicada de lo que pensó la propia Huawei, a tal punto que el reciente Honor 21 podría ser cancelado a pesar de haber sido anunciado recientemente o, en mejor de lo casos, tener una venta limitada.
La semana pasada te contábamos sobre la suspensión de operaciones global por parte de ZTE luego que el gobierno estadounidense, para ser exacto Departamento de Comercio, les prohibiera la exportación de componentes americanos.
Esta decisión hizo que Qualcomm dejara de vender sus procesadores y módems, mientras que el peligro de dejar de usar Android creía cada vez más. Por esas razones ZTE decidió suspender su negocio, pausando todo su trabajo a futuro mientras que con los dispositivos comercializados y los servicios prestados actualmente se cumpliría.
Hasta el día de hoy la situación del fabricante chino es bastante delicada, pero esto podría cambiar más pronto de lo que pensamos. Donald Trump, actual presidente de EEUU, decidió comentar sobre esta prohibición y a diferencia de comentarios anteriores, quiere ayudar a ZTE.
Trump se ha vuelto a sacar los protocolos de su gobierno y ha usado su cuenta de Twitter para comentar sobre el baneo a ZTE en su país, el cual habría sido causado por un incumplimiento por parte de ZTE, quien habría vendido productos con tecnología de EEUU a Irán.
«El presidente Xi de China, y yo, estamos trabajando juntos para ofrecer a la compañía telefónica china, ZTE, una manera de regresar a sus negocios, rápido. Se han perdido muchos empleos en China. El Departamento de Comercio ha sido instruido para que se consiga»
El presidente estadounidense mencionó en su tweet que está trabajando directamente con Xi Jinping, presidente de la República Popular de China, para ayudar lo más pronto posible ZTE, aunque esto también sería en general pues Huawei podría pasar por lo mismo.
Si lo mencionado por Donald Trump es cierto, esto quiere decir que ZTE podría «salvarse» y poder seguir comprando productos de Estados Unidos, así como evitar el bloqueo de sus productos y servicios, el asunto es que no hay una fecha confirmada para su retorno.
A pesar de ya estar en la presidencia de los Estados Unidos, Donald Trump sigue siendo un usuario muy seguido de Twitter y, como era de esperarse, sus tweets no pueden ser del agrado de muchos.
A pesar de ellos Trump cuenta con más de 36 millones de seguidores y hasta la fecha ha tuiteado más de 35.000 veces desde el 2009, fecha en la que se unió a Twitter.
Por supuesto no es el usuario con más seguidores y más interacción que posee Twitter, pero a pesar de no serlo es quizá el más valioso de la red social.
Según James Cakmak, actual analista de Monness Crespi Hardt & Co., menciona que Donald Trump vale mucho más de lo cualquier imaginaría pero sobretodo representa un fuerte ingreso para Twitter. Si Trump dejará de tuitear la empresa perdería 2.000 millones de dólares en la bolsa, lo que equivale a casi 1/5 de su valor.
¿Por qué Trump vale tanto para Twitter? Pues la mayoría de sus mensajes más virales y más cuestionados han sido a través de este medio y por ello todos los medios la han usado como fuente, lo que se traduce a más tráfico, sin contar que miles de partidarios de Trump, quizá millones, se han unido a Twitter para seguir a su líder.
Cakmak también menciona que actualmente Twitter debe contar con 125 millones de usuarios diarios activos, una suma muy por debajo de las redes sociales de Facebook (incluyendo Instagram), aunque hay que resaltar que Twitter dejó de ser «red social» hace mucho y ahora es un medio de comunicación.
Esto no significa que la salida de Donald Trump de Twitter represente la caída de la empresa, pero demuestra el valor económico que representa uno de los hombres poderosos e influyentes (para bien o para mal) del siglo XXI.