Al final de la Saga de Cell, Gohan era no solo el personaje más fuerte por sobre Goku y Vegeta incluso, sino que, con la muerte del primero y el retiro del segundo («jamás volveré a pelear»), pasaba a ser el principal defensor de la tierra y aquel a quien se le confiaba su destino. Toriyama en un primer momento lo quiso así. Y si bien al principio de la Saga de Boo teníamos a un Gohan protagonista, conforme fue pasando el tiempo y conforme Goku y Vegeta volvieron a ser el centro de atención, el hijo de Goku pasó a un segundo plano en el cual ya no pintaba casi nada.
Lamentablemente para sus fans, Dragon Ball GT y las primeras sagas de Dragon ball Super se encargaron se confirmar que Gohan, que en un momento fue capaz de vencer a Cell y plantarle pelea a Majin Boo, había perdido gran parte de su poder y que poco a poco se estaba convirtiendo en una especie de Yamcha entre los saiyajin.
Lo bueno es que la última saga de Dragon Ball Super ha querido de alguna manera reivindicar al personaje y en el capítulo más reciente nos ha dado la esperanza del regreso del Gohan que todos queríamos y admirábamos. Y todo esto gracias a la figura de Piccoro.
Para variar Goku delegando sus funciones a Piccoro
Según narra el propio Piccoro, con el torneo cada vez más cerca el Nameku aceptó la solicitud de Goku de unirse al grupo del Universo 7, accediendo adicionalmente a ayudar a Gohan con su entrenamiento, un entrenamiento que de cierta manera nos recordó a aquel entrenamiento de la primera parte de Dragon Ball Z en el cual Gohan aprendió a la mala a valerse por si mismo tras ser el niño mimado de Goku y Milk por tanto tiempo.
El entrenamiento que ambos tienen nos confirma dos cosas. La primera es que Gohan está muy por debajo de su nivel en la Saga de Boo. La segunda es que Piccoro tiene un nivel muy por encima del que tenía incluso en la Saga de Boo, llegando a superar a Gohan incluso tras alcanzar este el nivel SSJ2.
Además establece un patrón con respecto a Gohan y como deja una y otra vez que la victoria se le escape en el último minuto. Pasó con Cell, pasó con Majin Boo y pasó en el torneo de exhibición. Esto, según Piccoro, se debe a que Gohan puede ser muy fuerte pero no es un guerrero y es demasiado ingenuo para el combate.
Mystic Gohan
Lo bueno es que el entrenamiento y las palabras de Piccoro sirven para sacar lo mejor de él, por lo cual después de superar el nivel SSj2 Gohan finalmente vuelve a tener el poder que despertó el viejo Kaioshin en la Saga de Cell en él, el poder de Mystic Gohan.
Con este poder Gohan adquiere una fuerza por encima de la Piccoro, pero termina perdiendo nuevamente contra él por nuevamente confiarse, algo en lo que trabajarán en lo que les queda de tiempo de entrenamiento.
Tampoco podemos dejar de mencionar el guiño más nostálgico al inicio de Dragon Ball Z, el de la cola de dinosaurio cortada con la cual Gohan se alimentó por tanto tiempo.
Ya veremos si Gohan mantiene el nivel y llega a ser de ayuda, pero cuando menos está en el camino, algo que sinceramente sus fans le agradecemos a Toriyama.
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