En la madrugada del día de hoy, el medio coreano The Investor publicaba un artículo en el que se mencionaba que el Galaxy S8 se estaría vendiendo menos que su antecesor y, como era de esperarse, a Samsung no le gustó nada.
El medio menciona que en el mismo período de venta de ambos terminales, el Galaxy S8 se vende menos que el Galaxy S7. ¿Las razones? Citan ventas del Galaxy S8 en torno a los 9,8 millones en dos meses, una cifra 20% menor al Galaxy S7 y S7 Edge en el mismo período.
The Investor refuerza su información en la que la firma coreana habría disminuido la petición de componentes a sus proveedores. Samsung, por su parte, desmintió esta información y comenta que a diferencia del Galaxy S7 y S7 Edge, los nuevos Galaxy S8 y S8+ estuvieron disponibles en un inicio en menos países que los anteriores. No mencionan que las ventas sean mayores, más bien que son muy similares al día de hoy.
El pasado 16 de mayo, Samsung celebraba haber vendido 5 millones de unidades de los nuevos Galaxy S8, siendo ventas mayores a la de sus antecesores por un 25 a 30%. Estos primeros números marcan que los nuevos modelos tienen muy buena acogida, por lo que no habría razón para haber pausado las ventas, sobretodo ahora que ha bajado de precio y se encuentra a buen precio en algunas operadoras.
Así las ventas sean menores o iguales, en mejor de los casos, Samsung sigue consiguiendo mejores ingresos que sus rivales con Android y por mucho. De hecho no nos sorprendería que el segundo trimestre del año los beneficios de la empresa se disparen gracias a sus nuevos retoños.
Fuente: Android Authority
Dejar una respuesta