El combate de boxeo del fin de semana entre Logan Paul y Floyd Mayweather tuvo un ganador inesperado y no fue ni uno de estos. ¿Entonces? Fue una carta de pokémon, específicamente el famoso Charizard PSA 10 que llevo Logan en su cuello.
Meses atrás Logan empezó la búsqueda de esta carta del juego TCG Pokémon y con ello el precio de todas las cartas se elevaron drásticamente. En su «cruzada» llegó hasta Gary Haase, conocido como Rey Pokémon, y en ese momento adquirió un Charizard valorizado en $150.000 dólares.
Después de esto, Logan y varios streamers se han subido al tren de comprar cartas y realizar desempaquetado de cajas valorizadas en cerca de $200.000 dólares, a esto Logan ha dicho: «Consideró que invertir en activos que se revalorizan es mejor que gastar dinero en coches«.
Y a todo esto, ¿qué tiene que ver la pelea del fin de semana con este tema? Pues al terminar el combate Logan llevaba un colgante con una joya y no de las tradicionales, sino la de un Charizard.
Esta acción ha hecho que la carta se revalorice entre los $300.000 dólares hasta un millón de dólares, convirtiéndose en una carta muy valorizada por coleccionistas de todo el mundo.
Por lo tanto, los TCG (Trading Card Games) por este fenómeno han sufrido un crecimiento en sus cartas icónicas. Juegos como Magic y Yu-gi-oh!, y de otras franquicias, han comenzado a ver como cartas de sus primeras ediciones y cartas raras eleven su precio.
Logan Paul no es un ejemplo a seguir pero ha logrado mostrar un mercado emergente y volverlo rentable sin el mismo saberlo.
