Ya sabemos que actualizar a una nueva versión de Android puede ser un verdadero dolor de cabeza para los fabricantes. No solo deben esperar la versión final de Android mientras que sus usuarios empiezan a hacer presión para saber cuándo van a actualizar, sino también deben usar recursos y empezar las modificaciones para cada operador del planeta donde se vendan sus equipos y sí, nada de esto es gratis. Principal razón por la que la mayoría de marcas de dispositivos móviles se demoran actualizar una vida o simplemente no lo hacen.
De hecho fabricantes como Samsung y Huawei han demostrado que a pesar de ser los que más smartphones venden en Android tienen un largo retraso a la hora de actualizar sus smartphones, mientras que Sony, HTC y LG lo hacen velozmente, al menos en su gama alta.
Pues bien, esta vez los chicos de Sony han querido hacer una infografía explicando paso a paso como es desarrollar una actualización de Android para sus smartphones hasta su llegada sus equipos.
Entonces, ¿qué tan complicado es? Que nos lo cuente Sony.
Tal como se sabía, el proceso de actualización siempre se divide en dos pasos: desarrollo y revisión. En el primero vemos como el fabricante, Sony en este caso, debe esperar la SDK de la nueva versión de Android a cargo de Google y posteriormente adaptarla a sus smartphones, así mismo probar que el software y hardware funcionen a plenitud, para el paso anterior Google siempre entrega a cada fabricante el Platform Development Kit (PDK).
Una vez el fabricante pueda haber adaptado de forma correcta la última versión de Android a sus smartphones, toca añadir los extras propios como interfaz, aplicaciones de cámara, entre otras cosas. Todo esto se debe testear para que su funcionamiento sea igual de bueno que el anterior o, en la mayoría de los casos, mejor. Este proceso es el que más puede tomar pues el fabricante debe haber todas las pruebas necesarias para que todo funcione, aquí suele fallar la mayoría.
Si todo está bien deben enviar su versión de Android a Google, quienes revisarán si todo está en orden. Una vez se apruebe se confirmará que la nueva versión ya puede ser «liberada» y semanas después empieza a llegar a los equipos, obviamente a los libres de fábrica.
Sony no menciona el dolor de cabeza para hacer las actualizaciones por operador, pues a los pasos anteriormente mencionados se añade que ellos deben agregar el bloatware del operador y luego pasa por el proceso de homologación (el suele demorar más), donde el operador aprueba la actualización y posteriormente se empieza a enviar la actualización.
Fuente: Sony
