El Galaxy S7 y S7 Edge ya llevan más de un mes con nosotros y en todo este tiempo han empezado a aparecer ciertas fallas en el terminal, problemas bastantes comunes los primeros días de distribución y que eran corregidos por software, pero el de ahora es imposible de solucionarse de esta forma.

A través de Phone Arena nos enteramos que el botón de inicio de algunos Galaxy S7 y S7 Edge se dañan con bastante facilidad, el caso parecía aislado pero son bastantes los que están apareciendo en cada momento, ya sean en los foros de la fuente o también en otros. Parece ser que algunos modelos de los recientes Galaxys no soportan demasiado bien el uso que le dan sus usuarios, ya que según ellos mismos estos se arañaban con mucha facilidad.

El problema no ha sido reportado al día de hoy en la versión que se distribuye en Latinoamérica, los problemas están más que todo presentes en los modelos europeos y americanos. Parece ser que Samsung no usa ningún recubrimiento especial en el lector de huella, motivo por el cual se raya. Otros fabricantes como Apple, LG, HTC o Huawei sí cuentan con una protección para evitar estos inconvenientes, habrá que ver si son casos aislados es un problema general.

¿Eres usuario de un Galaxy S7 o S7 Edge? ¿Has notado rayaduras o arañazos en tu sensor de huellas?

 Fuente: Phone Arena

Cuando los Galaxy S7 y S7 Edge se presentaron en el MWC 2016, una de las características más comentadas fue su sistema de refrigeración líquida, algo que el resto de smartphone no tiene y que solo hemos podido ver en los recientes Lumia 950 y 950 XL. Si bien días después de la venta oficial de los dispositivos un youtuber nos explicaba como funcionaba este sistema de refrigeración, hoy Samsung ha decidido salir a explicar personalmente este sistema a través de sus ingenieros.

Los ingenieros que desarrollaron el sistema de refrigeración en los recientes Galaxy S7 han comentado que el tubo de refrigeración es extremadamente fino, apenas tiene 0.4 mm de diámetro y 0.2 mm de ancho en su interior, siendo el sistema de refrigeración más pequeño del mercado en la industria móvil. El material del tubo es de cobre, posee muy escasa cantidad de líquido, posiblemente agua, que se evapora al enfriar el CPU y que nuevamente se condensa en líquido para volver al tubo.

El personal de Samsung estuvo buscando meses una solución de terceros para sus necesidades, pero al no encontrarla se vieron en la obligación de fabricarlas ellos mismos y el resultado ya lo conocemos todos. Al no calentar como otros teléfonos, el Galaxy S7 y S7 Edge evitan el sobrecalentamiento del procesador y GPU, evitando el  famoso throtling, el cual reduce el rendimiento del dispositivo por su elevada temperatura.