Este 2020 fue un año realmente complicado para los fabricantes de dispositivos móviles y diversos reportes confirman que la venta de smartphones se redujo para la mayoría a comparación del año anterior. La recesión económica y la pandemia global afectaron fuertemente a todos.
Hemos visto como los usuarios se han saltado en su mayoría los teléfonos de gama alta a favor de equipos más accesibles como los Gama Media y Gama de Entrada.
Por lo que si no tenías un buen catálogo en estas gamas la tenías difícil o tenías que cambiar la estrategia rápidamente y algo así le ocurrió a LG, fabricante que ya está arrastrando problemas desde hace unos 3 o 4 años y que recién este año parece haber encontrado en cierta forma un equilibrio al cambiar de estrategia.
Pues bien, en mayo se anunció el LG Velvet, el reemplazo espiritual del LG G9 que llegaba como principal novedad ofrecer un renovado diseño y características muy interesantes a menor costo de lo habitual en el fabricante coreano.
Ahora el «problema» que ocasionó este modelo es que para abaratar costos y darle compatibilidad 5G, LG optó por un procesador Snapdragon 765G con chipset 5G, el cual está dentro de la Gama Media Premium.
Misma estrategia ha seguido Google este año con los Pixel 5. La diferencia es que a ellos no los han estigmatizado como a LG.
Al igual que otros fabricantes, LG optó por hacer una versión 4G para los países 5G y es así como llega el LG Velvet con una configuración casi calcada, excepto el procesador que a Latinoamérica y a ciertos países europeos llegó con el Snapdragon 845, procesador de gama alta del 2018.
Y, tal como se esperaba, las críticas llegaron por el uso de un procesador «desfasado». Lo irónico aquí es que ese procesador de gama alta de 2018 tiene mejor rendimiento y es más potente que el chipset que lleva el Velvet con 5G.
Ahora la pregunta del millón, ¿vale la pena? Todo depende del precio y el actual indica que sí.
Diseño
Si hay algo donde destaca el LG Velvet es en diseño y construcción. El engreído de los coreanos atrae rápidamente desde que lo ves, es un amor a primera vista.
Cuenta con una construcción de cristal y vidrio, se siente muy bien en el día a día, no genera tantas huellas como otro teléfonos y es mucho más delgado que estos. A esto sumamos que LG ha logrado hacer un teléfono delgado al día de hoy, consiguiendo un grosor de 7.9 mm, por lo que llevarlo en el bolsillo es súper práctico, algo que no he sentido con otros teléfonos de Xiaomi, Samsung, Huawei, entre otros.
Ya sabemos que la mayoría de teléfonos de gama premium son bonitos y tienen buena construcción, el LG Velvet no es la excepción pero va un poco más allá.
Tanto la parte frontal como la trasera tiene esquinas redondeadas, después de todo almacena una pantalla curva, pero no resulta incómoda o tosca.
Lo que sí puede sorprender a algunos es que es más alargado de lo habitual, en cierta parte por su formato de pantalla, por lo que mide 16.7 centímetros y es un poco más largo que otros terminales con el mismo tamaño de pantalla, incluso más alto que el Galaxy Note 20 Ultra, el cual tiene un panel de 6.9 pulgadas.
Lo bueno es que al ser delgado y tener un peso bien balanceado puede manipularse con una mano y no se siente tan resbaloso como otros terminales con construcción similar.
En cuanto a la distribución de botones, tenemos los controles de volumen y el botón de Assistant en el lado izquierdo, mientras que al lado derecho se encuentra el botón de encendido/bloqueo. Creo que es el terminal con mejor accesibilidad de botones que he probado este año, es muy natural usarlos y no te equivocas en ningún momento.
En la parte superior tenemos la bandeja SIM, mientras que en lado opuesto nos encontramos el puerto USB Tipo C, altavoz y entrada jack de 3.5 mm, algo inexplicablemente olvidado por los fabricantes rivales.
En la parte trasera tenemos el sistema de cámaras en forma de gota, mientras que más abajo nos encontramos con el logo de la marca.
No he notado ninguna desventaja o diferencia en contra en el LG Velvet con teléfonos de Gama Alta mucho más caros que este, de hecho mi experiencia es más favorable por pesar menos. De hecho tiene mejor construcción que terminales con precio más elevado, véase el Mi 10T Pro de Xiaomi o el Galaxy S20 FE.
Pantalla
Visualmente el LG Velvet es magnífico y no solo por su diseño del cual hablamos párrafos más arriba, sino también por su pantalla que es excelente.
El smartphone de LG lleva una pantalla curva OLED de 6.8 pulgada con resolución FHD+ de 1080 x 2460 píxeles en formato 20,5:9, el cual es un formato tipo cine y aprovecha de mejor forma el panel del dispositivo para ver vídeos de este tipo.
En cuanto a las curvas del terminal debo decir que lo hacen lucir muy bien pero me generaban dudas, pero al pasar los días me di cuenta que es una estrategia muy diferente a la que usan otros fabricantes.
La principal desventaja de una pantalla curva es la fragilidad, esto también aplicaría al Velvet pero el diseño no es tan resbaladizo. El otro punto negativo es que atrae fácilmente los puntos fantasmas, algo que Samsung, Huawei y Xiaomi saben a la perfección pero LG se las ingenió para evitarlos. ¿Cómo? Pues no reduciendo totalmente los bordes de la pantalla, por lo que el usuario no llega a tener inconvenientes a la hora de usar el panel.
Curiosamente esto también es una desventaja si usas el control de gestos de Google y es que para ir «atrás» debes jalar desde la curva y puedes fallar si es que no estás totalmente acostumbrado. Esto podría dificultar la experiencia con algunos juegos con gestos similares.
Sin llegar a ser la pantalla de un Galaxy Note 20 Ultra o un iPhone 12 Pro Max, el panel del LG Velvet es espectacular y afirmo que es el mejor que puedes encontrar en su rango de precio.
En la práctica el panel OLED del LG Velvet es espectacular, posiblemente la mejor pantalla que he probado en un smartphone de LG. El contraste, los ángulos de visión y el brillo son excelentes, aunque este último no es tan algo como la gama alta de Samsung.
Además el sistema ofrece personalizar y calibrar la pantalla donde encontramos modos como natural, vivo, cine o personalizado donde podremos personalizar temperatura, balance de blancos, entre otros.
Ahora, a pesar de lo que uno creía, el LG Velvet no llega con una tasa de refresco, se queda en los clásicos 60 Hz y esto puede ser un paso atrás para varios y en cierta forma es verdad, pero prefiero un panel OLED de calidad que una tasa de refresco alta en panel regular.
Si lo comparamos con sus rivales un poco más costosos (entre S/2000 y S/2500), el Mi 10T/10T Pro y los Galaxy S20 FE, el panel del LG Velvet es mejor en contraste y ángulos de visión, pero la pantalla de los anteriormente mencionados tienen mayor velocidad en tasa de refresco.
En el día a día, el panel de este equipo es ideal para disfrutar de contenido multimedia y también jugar, luciéndose muy bien también en contraluz.
Hardware y rendimiento
Y llegamos al apartado más polémico para muchos, el hardware. El LG Velvet es un teléfono caro pero no tan costoso como la gama alta actual, por lo que se le exige que sus componentes sean de primera y en sí lo son.
Recuerden que al inicio les comentábamos que luego de anunciarse el LG Velvet los medios no sabían posicionarlo como gama alta o gama media premium y es que usa componentes de alta gama pero lleva un procesador de Gama Media Premium en su versión 5G, mientras que en el modelo regional usa uno de Gama Alta pero del 2018.
A pesar de las limitaciones que algunos pueden encontrar, el equipo no tiene lags. Es fluido.
El modelo que hemos probado en este último mes usa un procesador Snapdragon 845, el chipset de Android más potente del 2018, acompañado por 6 GB de RAM y 128 GB de memoria interna del tipo UFS 2.1 ampliable vía microSD.
Esta combinación no hace al LG Velvet el teléfono más rápido del mercado pero sí lo hace bastante veloz, siendo más rápido y completo que otros terminales por debajo de su precio actual (S/1899).
El uso que le doy a diario es el mismo que hago desde años y consiste en mailing, chatear, redes sociales, ver vídeos, tomar fotos, jugar unos 20-30 minutos al día, escuchar Spotify, hacer videollamadas, entre otras cosas. El Velvet puede hacer todo eso sin sudar.
En el apartado de audio tenemos dos parlantes estéreo que hacen un buen trabajo pero que en algunas ocasiones, algo aleatorias, suelen distorsionar en audio en máximo volumen. Esto puede «solucionarse» con el ecualizador, que por cierto es completo, o usando los perfiles de sonido personalizado.
Lo que sí se hace extrañar es la falta de un DAC dedicado como si han tenido los teléfonos premium de LG pero que al parecer este año se quedaron exclusivamente en el LG V60.
No puede faltar el puerto de auriculares de 3.5 mm, soporte Bluetooth 5.1, Wi-Fi ac, Radio FM, NFC, certificación IP68 y certificación militar STD-810G.
El lector de huellas se encuentra dentro de la pantalla y, tal como mencionamos párrafos más arriba, ofrece un buen resultado pero no es el más rápido del mercado. Este es el único sistema biométrico del teléfono, por lo que se extraña todo que llevaba el LG G8s, al que básicamente no le faltaba nada.
Cámara
LG fue el pionero de varias características esenciales al día de hoy en un smartphone y el apartado fotográfico fue una de estas, el LG G4 de años atrás fue un teléfono excepcional con una estupenda cámara y un Modo de Fotos muy completo. ¿Cómo le va este 2020 con el LG Velvet? Pues bien, el lente principal no decepciona y es bastante bueno pero no llega a superar, en términos generales, a equipos un poco más costosos dentro de la gama alta, aunque dentro de su categoría no tiene rival.
- Lente principal de 48 MP con apertura f/1.8, PDAF y soporte HDR
- Ultra Gran Angular de 8 MP con apertura f/2.2 y 120°
- Sensor de profundidad de 5 MP con apertura f/2.4
- Cámara frontal de 16 MP con apertura f/1.9 y soporte HDR
En esta configuración no encontramos estabilizador óptico, soporte HDR10 ni lentes teleobjetivos.
En condiciones con buena iluminación la cámara ofrece excelentes resultados, llenos de detalles y contraste pero con una ligera sobreexposición. Cuando la luz se reduce ligeramente vemos también como el color no es tan preciso y es un poco más claro de lo habitual.
Por su parte el uso de HDR suma, sobretodo en objetivos con sombra y no lastima el procesado. Lo que se sigue agradeciendo es que el software de cámara sigue siendo muy completo pero siento también que al día de hoy se queda un poco atrás y es que algunas opciones no están en la interfaz estándar.
En cuanto al ultra gran angular, LG no apuesta por lentes con gran apertura y tamaño como sus rivales más directos, en vez de eso ofrece un sensor pequeño que preserva el detalle, por lo que en varias tomas podemos ver cierto ruido en las esquinas. Puede parecer negativo, pero debo admitir que prefiero esto a imágenes lavadas.
Sobre los selfies tenemos buenos resultados en condiciones con buena iluminación, destacando la definición y el balance de color. Personalmente no recomiendo el Modo Retrato, pierdes el HDR y encima aparece más ruido de lo habitual para tratar de difuminar el escenario.
¿Y las fotos nocturnas? Ahí van, no son malas tampoco excelentes, diría que están ligeramente por encima de lo regular, llegando a lo bueno. Prefieren detallar mejor el centro del autofocus en vez del resto de las esquinas, de la misma forma que sucede con el ultra gran angular.
¿En resumen? Creo que este es el Talón de Aquiles del terminal. Solo la cámara principal y el ultra gran angular dan batalla pero hay cierto ventaja frente a teléfonos como el Mi Note 10 Lite o el Galaxy A71. En algunas ocasiones sentía que lograba mejores resultados en condiciones buena luz que el Galaxy S20 FE, un teléfono de gama alta, pero cuando los escenarios eran más complicados, todo salía a favor del terminal de Samsung.
Batería
Durante años LG tropezó con la misma piedra, la batería. ¿Y ahora? Pues todo ha cambiado para bien. La autonomía del LG Velvet es excelente.
Desde el año pasado hemos visto cambios favorables en los smartphones del fabricante, sobretodo en la gama alta, donde conseguían mejores resultados que los teléfonos de Samsung en la misma categoría.
Pues bien, este año los resultados son similares y el LG Velvet consigue una autonomía muy buena, pudiendo llegar a casa en un día de un uso intensivo sin problemas o día y medio de uso moderado.
El equipo cuenta con una batería de 4.300 mAh y si bien posee un enorme panel de 6.8 pulgadas no logra consumir tantos recursos como se esperaba y eso que está usando el Snapdragon 845, un procesador que consume más que sus versiones actuales o que el Snapdragon 765G con el que llega en su versión 5G.
He estado más lejos del enchufe con el LG Velvet que con otros terminales de su misma gama como el Mi 10, Galaxy S20+, entre otros.
En uso intensivo del día, el promedio de pantalla va entre 6 horas y 20 minutos a 7:30 horas, si me dedico a ver vídeos el resultado puede alargarse un poco más, llegando hasta las 8 horas.
En mi uso tenemos uso constante de redes sociales, apps de mensajería, Spotify, correo, navegación por Chrome, uso de cámara y unos 20-30 minutos de Pokémon Masters, un juego pesado que consume muchos recursos.
Lo único mejorable de la batería es su carga rápida, que apenas se queda en 15W, por lo que el tiempo de carga suele ser de 1 hora y 30 minutos aproximadamente. La carga rápida es de 9W y si bien no es la más veloz, es el único teléfono en su rango de precio que sí la posee.
Conclusiones
Me gusta
- Excelente pantalla
- Muy buena autonomía
- Buen rendimiento
- Excelente en audio y grabación de este
- Buena cámara principal
- LG UX es cada vez mejor
- Resistencia a agua y polvo
- Puerto de auriculares de 3.5 mm
Mejorable
- La velocidad de la carga rápida es mejorable
- Una tasa de refresco de 90 hz habría sido genial
- El lector de huellas podría ser más rápido
No me gusta
- No hay estabilizador óptico
- Solo disponible localmente en color negro
El LG Velvet es un gran teléfono que llega con una inexplicable mala fama. Sí, ya sé que no es el gama alta que uno esperaba pero LG no ha buscado ofrecer un teléfono en dicha categoría.
El smartphone es precioso, tiene una excelente autonomía, muy buena pantalla, buen sistema de cámaras, una buena capa de personalización y un gran rendimiento pero no llega al nivel de potencia de smartphones un poco más caros como el Mi 10T o el Galaxy S20 FE.
Por supuesto no es perfecto y hay cosas por mejorar como el Modo Noche, el uso de un mejor procesador con mayor rendimiento o un sistema de cámaras más completo, como el uso de un lente teleobjetivo en vez sensor de profundidad.
Ahora, ¿vale la pena? Por supuesto. Al día de hoy puedes encontrarlo por S/1899 y por ese valor es el mejor dispositivo que puedes comprar.