Con el 2016 ya en su último tramo, va siendo hora de las últimas comparativas del año. Y qué mejor que empezar con un apartado tan importante como es la velocidad.
¿Qué se mide en estas pruebas? Pues fuera del hardware o software que integre uno u otro equipo, lo que analizamos en estos tests es la velocidad con la que un equipo abre aplicaciones, desde las más básicas posibles, hasta las más complicadas y que requieren una regular capacidad de procesamiento. Además, como bonus, también revisamos que tan eficiente es al momento de abrir tareas en 2do plano, algo importantísimo para usuarios multitarea que se la pasan entre una y otra app mientras usan su smartphone.
Usando este sistema, David de Phonebuff ha sometido a escrutinio la velocidad y gestión de RAM de tres de los teléfonos Android más top del año en cuanto a rendimiento: El Galaxy S7 Edge, Pixel XL y OnePlus 3T. ¿Quién ganó? Pues véanlo ustedes mismos.
Como pueden observar, el ganador absoluto de esta competición es el OnePlus 3T, teléfono que no solo demostró ser más rápido que sus contendientes, sino que también confirmó que no tiene esos 6 GB de RAM en vano y barrió al Galaxy S7 Edge y al Pixel XL al momento de traer las tareas de 2do plano nuevamente a 1er plano.
Probablemente lo más interesante del asunto es que el OnePlus 3T es a la vez el más potente de los tres, con un Snapdragon 821 y 6 GB de RAM, pero a su vez también es el más barato, costando al menos $200 menos que su competidor más cercano (el Galaxy S7 Edge).
Entonces chicos, ya saben, si lo que más les importa es la rapidez y no tienen la menor intención de comprar un iPhone 7 Plus (el rey de estas pruebas hasta el momento), el OnePlus 3T debería ser su primera elección
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